La escuela aún es albergue de familias damnificadas por el paso de los huracanes Eta e Iota.
Iván Saldaña contacto@frecuenciainformativa.com
La escuela de Boca de Remedio, en el distrito de Besikö, comarca Ngäbe Buglé, sigue siendo el albergue de decenas de familias de esta comunidad, que se vieron afectadas, por las pasadas inundaciones y deslizamientos, ocasionados por los huracanes Eta e Iota, en noviembre de 2020.
Después de 4 meses y con la promesa del presidente de la República, Laurentino Cortizo, de brindar los recursos para su rehabilitación y construcción de nuevas aulas, hasta la fecha, casi nada se sabe de esto, sobre todo, cuando se habla de un pronto regreso a clases.
Martín Santana, director de la escuela, envió un mensaje al Ministerio de Educación y al presidente Cortizo, ya que, «se comprometió durante la tragedia en esta comunidad que destinaría un presupuesto este año, se habla de clases presenciales, pero no hemos visto ningún tipo de trabajo, para arreglar las aulas temporales y la construcción que quedó paralizada en este centro educativo».
Diomedes Rodríguez, de la Asociación de Padres de Familia, también insistió en la necesidad de arreglar esta escuela, «las aulas temporales tienen más de cuatro años en abandono y lo necesitamos de urgencia, para que los docentes y estudiantes puedan volver a clases, no queremos volver a las calles», concluyó el padre.